
Nisiquiera el deliberado azar de la genética nos libra de esto
No es que no me gustes,
la verdad es que nunca (por razones obvias, varias) lo había pensado así
(pero qué bonito es tu mentón, me dices)
No me interrumpas
que lo que te voy a decir
es
import
ante
por favor
déjame h
abl
ar
que si me besas no me escuchas.
Al fin sostienes tu cabeza sobre tus dos manos
juegas con el humo que sale de túyasabesdónde
te acicalas
acomodas la humanidad de tu desnudez en posiciones anatómicas poco convencionales
(como tú, me dices)
acá es donde comienzo a divagar acerca de nuestra naturaleza
y la naturaleza de tu N. empieza a florecer en la primavera de una bajona anticipada
(KFC o Bembos, preguntas mientras coges el teléfono con la derecha y el cigarrillo con la izquierda)
Técnicamente con tu neurosis y mi gran capacidad para divagar
¿Eres feliz ahora?
No, no lo creo
Sigo siendo el mismo infeliz de siempre,
Solo que ahora sonrío más
Sí, pues, seguimos siendo los mismos infelices
pero qué rica infelicidad compartida.
No estoy en condiciones de proponerte nada,
pero sé lo que quiero
No seas mi novio
Seamos tú y yo
(y nada más)